En la actualidad, jubilarse no significa necesariamente dejar de trabajar por completo. La jubilación flexible te permite seguir trabajando a tiempo parcial mientras cobras parte de tu pensión. En este artículo, te contamos todo lo que necesitas saber sobre esta modalidad, sus requisitos y ventajas. ¡Descubre si es la opción adecuada para ti!
¿En qué consiste la jubilación flexible?
La jubilación flexible es una modalidad que permite compatibilizar el cobro de la pensión con un trabajo a tiempo parcial. A diferencia de la jubilación total, en la que dejas por completo el mundo laboral, la jubilación flexible te ofrece la oportunidad de seguir activo en el mercado de trabajo, siempre con un contrato a tiempo parcial, lo que implica que no puedes trabajar más del 50% de una jornada completa.
El concepto se introdujo para brindar mayor flexibilidad a las personas que, aun alcanzando la edad de jubilación, desean seguir trabajando, aunque con menos intensidad. Según la normativa vigente en España, el jubilado debe reducir su jornada laboral entre un 25% y un 50% respecto a una jornada completa.
¿Cuánto se cobra con la jubilación flexible?
La fórmula básica es sencilla: cuanto más trabajes, menos pensión cobrarás, y viceversa. El cálculo del importe de la jubilación flexible depende directamente del porcentaje de reducción de jornada. El importe de la pensión se reduce proporcionalmente a las horas trabajadas. Por ejemplo, si reduces tu jornada en un 50%, tu pensión también se verá reducida en un 50%. Si la reducción es del 25%, la pensión se reducirá un 25%, quedando el otro 75% a disposición del pensionista.
Una vez que se interrumpe la actividad laboral parcial, la pensión vuelve a restablecerse al 100%. Además, las cotizaciones realizadas durante el tiempo que trabajaste a tiempo parcial pueden aumentar la cuantía final de la pensión, ya que se recalcula la base reguladora.
¿Qué ventajas tiene la jubilación flexible?
La jubilación flexible ofrece varias ventajas, tanto a corto como a largo plazo:
- Prolongación de la vida laboral: si disfrutas de tu trabajo y no quieres dejar de ser productivo, esta modalidad te permite seguir activo sin la exigencia de una jornada completa.
- Ingresos adicionales: al combinar la pensión con un salario parcial, obtienes una mayor estabilidad económica que si solo dependieras de una pensión.
- Aumento de la pensión futura: las cotizaciones realizadas durante el tiempo que trabajes con un contrato a tiempo parcial se suman a tu historial laboral, lo que puede mejorar la cuantía de tu pensión cuando finalmente te retires por completo.
- Flexibilidad: te permite ajustar tu tiempo de trabajo según tus necesidades personales o familiares.
- Mejor transición hacia la jubilación total: si te resulta difícil dejar de trabajar de manera repentina, la jubilación flexible te brinda una transición más suave hacia una jubilación completa.
Requisitos para acceder a la jubilación flexible
Para acceder a la jubilación flexible, debes cumplir con una serie de requisitos. A continuación, te detallamos los más importantes:
- Edad de jubilación: debes haber alcanzado la edad legal de jubilación para poder optar a esta modalidad. Esto significa que no puedes acceder a la jubilación flexible de manera anticipada.
- Contrato a tiempo parcial: es imprescindible tener un contrato laboral a tiempo parcial, cuya jornada se sitúe entre el 25% y el 50% de la jornada completa correspondiente a tu puesto de trabajo.
- Reducción proporcional de la pensión: la reducción de la pensión será proporcional a la jornada laboral que realices. La pensión disminuye en función de las horas que sigas trabajando.
- Exclusiones: No puedes acceder a la jubilación flexible si trabajas en el sector público o por cuenta propia. Además, tampoco es compatible con la percepción de otras pensiones, como la de incapacidad permanente.
¿Cómo solicitar la jubilación flexible?
Solicitar la jubilación flexible es un proceso sencillo, pero requiere cumplir con una serie de trámites:
- Reconocimiento de la pensión: lo primero que debes hacer es solicitar la jubilación ordinaria. Para ello, es necesario que ya hayas alcanzado la edad de jubilación y cumplas con los años mínimos de cotización.
- Notificación a la Seguridad Social: una vez que tu pensión ha sido reconocida, debes comunicar a la Seguridad Social que tienes la intención de trabajar a tiempo parcial bajo el régimen de jubilación flexible.
- Recálculo de la pensión: tras aprobarse la solicitud, la Seguridad Social recalcula la cuantía de tu pensión en función de la reducción de jornada que realices.
- Cese de la actividad parcial: cuando decidas dejar de trabajar por completo, debes comunicar a la Seguridad Social el fin de la actividad laboral. En ese momento, se restablecerá el cobro íntegro de la pensión, con las posibles mejoras derivadas de las cotizaciones acumuladas durante el periodo de trabajo a tiempo parcial.
Jubilación flexible, activa y parcial. ¿En qué se diferencian?
Es importante distinguir entre la jubilación flexible, la jubilación activa y la jubilación parcial, ya que, aunque las tres modalidades permiten compatibilizar trabajo y pensión, tienen diferencias significativas:
Jubilación flexible
Se accede una vez que la persona ya se ha jubilado, con la posibilidad de trabajar a tiempo parcial y recibir una parte de la pensión proporcional a la reducción de jornada.
Jubilación activa
Permite trabajar tanto a jornada completa como parcial, pero la pensión siempre se reduce al 50% del total, independientemente de la jornada laboral. Además, los autónomos que contraten a empleados pueden cobrar el 100% de la pensión.
Jubilación parcial
Se solicita antes de la jubilación completa, permitiendo reducir la jornada laboral progresivamente mientras se percibe una pensión parcial. Esta modalidad suele estar vinculada a la figura del contrato de relevo, donde se contrata a otro trabajador para que asuma la parte de la jornada que queda vacante.
Conclusión
La jubilación flexible es una opción interesante para quienes quieren seguir activos en el mundo laboral, manteniendo al mismo tiempo una parte de su pensión. Si cumples con los requisitos y te interesa una transición gradual hacia la jubilación total, esta modalidad puede ofrecerte el equilibrio entre ingresos, trabajo y calidad de vida.
Recuerda que, antes de tomar una decisión, es recomendable consultar con Arrabe Integra para evaluar cuál es la mejor opción según tus circunstancias personales.